Pinchao en Brasil, parte 1 y espero que última

Rememorando grandes momentos, le pongo título a este post que para algunos ya es conocido. Fue en 2009, conociendo Colombia con Ginhas, Heavy e Irris. Creo que fue gracias a un autobus averiado a las 5 de la madrugada en plena carretera que nació Pinchaos en Colmbia. De esto me acordé unos días atrás...

Como si ya estuviera escrita, esta historia también empieza a las 5 de la madrugada que fue cuando el autobús nos dejaba en el famoso Rio de Janeiro. Aún estaba oscuro, y mientras me despedía de Armando, las cooperativas de taxi se peleaban para llevarme a precio gringo a donde yo quisiera. Pero aquí ni se gasta en taxis ni se necesitan, o eso creía. El plan era fácil; Maicon, un paco que había conocido en Ouro Preto y vivía en Rio, me recogía, íbamos a casa y a caminar, fantástico!

Por cierto, olvidé algunos detalles. El día anterior había salido decidido a pegar una carona desde Ouro Preto para Rio. No parecía complicado pues no están lejos (400 km en Brasil es como ir de Barcelona a Sancu). Llevaba 2 putas horas en la carretera con mi cartelito precioso hasta que llego un buen hombre y me dijo que estaba en el lugar erróneo. Entre la resaca y que la correcta estaba en Cancún, decidí tirar de autobús. Es mas duro esto de pegar carona solo. No hay con quien conversar ni compartir las largas horas de espera. Pero bueno, seguimos...

Pero como si obvio pareciera, las cosas nunca salen tan fácil. El celular del colega Maicon estaba desconectado, aunque por suerte, en un peqeuño papel medio roto, tenía anotada su dirección, así que sólo había que llegar hasta allí.

Me costó salir de la estación. Era de noche aún. Mejor esperar a que amaneciera y las calles se llenaran. La oscuridad siempre fue mas peligrosa. Además, Rio me impresionó. Entre la fama y la cantidad de gente malviviendo a las afueras de la estación, era mejor resguardarse.

Desaparecieron las bajas nuebes matinales y de lejos, bien arriba, apareció, imponente, el Cristo Redentor. Esa fue la señal que me hizo tirarme a buscar la casa del paco. Parecía fácil, pues sabiendo el nombre de la calle y el barrio, poco más se necesitaba.

Al llegar a São Conrado, un sitio tan plácido como irreal, pues está debajo de la mayor favela de la ciudad, Rochina, y es un barrio lleno de clubs de golf, edificios con muebles caros y gente rica, todo un homenaje a la hipocresia. Preguntando a absolutamente toda persona que me cruzaba, incluyendo taxistas, trabajadores, gasolineros, resulta que nadie conocía la calle Daves Bila de los cojones. Viendo el panorama, la decisión que consideré mas sabia fue sentarme, y fumarme un buen cigarro. Allí tuve la suerte de hacerme colega del quiosquero de la calle. Parecía un paco de vida relajada y sin sobresaltos, pero tenía su propia historia. Hacía diez años que había conseguido salir de la cocaína, adicción que le quitó todo, familia y dinero, y lo peor, la sensación de haber tirado por la borda unos años que podrían haber sido hermosos. Aquí es fácil escuchar historias bizarras, demasiado a veces. Eran las 9 y se estaba terminando la cuarta cerveza del día...

Recordé, en un flash que no se por que no me vino 4 o 5 horas antes (por que será?), que tenía otro número de teléfono. Era de otro amigo que había conocido en Ouro Preto. Al llamarlo me recomendó ir a buscar una posada al famoso barrio de Ipanema, así que autobús y pá lante.

Ipanema es tan famoso como, dependiendo desde que punto de vista, vergonzoso, y rápido uno se da cuenta que allí pocas posadas va a encontrar por pocos euros. 45 reales por noche la más barata (algo mas de 20 euros), porque todo lo demás oscila entre uno y dos salarios mínimos. Entre que está fuera de presupuesto y que no me estaba sintiendo muy a gusto allí, se me empezaban a terminar los recursos. Eran las 11 de la mañana, tenía hambre y todo era caro, me estaba meando, no sabía a donde ir, no tenía con quien compartir aquello y encima, me había quedado sin cerillas...

Al fin encontré una Lan house en la que el minuto de internet era mas caro que el metro cuadrado en Barna, pero había que hacer algo. De nuevo, fue la parte esa del cerebro que con frecuencia no trabaja, que apareció para decirme que había contactado con un paco de couchsurfing unos días antes y que habíamos dejado algo a medias. Conseguí llamarle y quedamos en encontrarnos por la tarde en su casa, genial!!!

Al pagar la Lan House encontré un mechero en la riñonera, salí y apareció el típico vendedor ambulante con bocatas a precio del nuestro. Me senté en la arena de la playa de Ipanema, con el clásico pedrusco que aparece en fotos y postales a la derecha, un montón de tías que llevan bikini porque aún no está permitido ir en pelotas y con un buen cigarro en la boca escribí estas líneas.

Y el camino seguía hacia Ouro Preto

Tras la despedida tocaba encontrarse con un de aquellos lugares que no quería dejar de conocer. Hace años que leí en una revista sobre él, y además, Ouro Preto tiene una importancia histórica muy grande para Brasil.

Divisando el plan

Cuando se descubrieron grandes cantidades de oro allí, los colonizadores centraron sus esfuerzos en esta región. Esta es una de las razones por las que hoy en día, el sur brasilero está mucho más desarrollado que el norte. Entre otras cosas, prohibieron el aceso a la ciudad a cualquier persona ajena a la corona, trasladaron la capital del país de Recife a Rio de Janeiro que se convirtió en puerto de salida de todas las materias, y aumentó aún más el comercio de esclavos.

Pues allí llegó Barrulas, un lunes por la noche. Rapidamente conoci a grandes pacos que estaban en el mismo hostel que yo. Entre ellos un pelotudo que llevaba año y 3 meses viajando; vivía de la fotografia y el tio llevaba una muñeca de 2 metros con la que se montaba sus escenas fotográficas, no hay como ser artista!! Y además viajaba con un cochazo del año 73, toda una gran historia.

Ouro Preto tiene mucho por hacer. Es increíble la cantidad de agua, ríos, cascadas y vegetación que tiene este país, así que hubo que hacer una expedición hacia la cachoeira andorinha (golondrina). El equipo era corto de efectivos pero iba sobrado; David, un portugués y Barrulas. Calentamos motores tomando baño en un pequeño río que apareció por el camino. Tras el cigarro de rigor, empezamos a abrirnos camino, bueno, simplemente seguimos la senda que estaba marcada, no fuimos los primeros en ir a ese lugar.

Hubo que acercarse al abismo para confirmar la existencia de agua ahí abajo (estas fotos no son mías, como se puede comprovar en el pie derecho). Tras un rato de caminada llegamos; una caída de agua de por lo menos 20 metros. Nos acercamos arrastrandonos por el suelo, pues da bastante impresión. Parecía que ahí quedaba nuestra escuersión, pero antes, decidimos subir río arriba para ver que encontrábamos. Fue un paseo lindo, no demasiado largo hasta que, merecidamente, recibimos nuestra recompensa.

Aquí está, el premio y el causante de mi actual resfriado

Pero Ouro Preto por si solo ya se vale una visita, asi que al dia siguiente tocaba dia de paseo, tranquilidad, caminar, entrar a algun museo, y como debe de ser, tomarse una cervecita en frente de una linda puesta de sol.

Buenris

Tiradentes fue un paco que intentó hacer la revolución y expulsar a los portugueses de la región, pero acabó siendo capturado, degollado en la plaza del pueblo, y las partes de su cuerpo fueron esparcidas por la ciudad como medida intimidatoria.

Antes de partir, conversé un rato con el sapo y la oveja de las montañas preguntando por donde debía continuar...

Mucha Suerte Natalia!!!

Sentado en el bus, me pongo una canción propicia para el momento, Alone Again Naturally, y te dedico unas palabras;

Aun recuerdo aquel dia en que me desperté con resaca pero con una sensación en el estómago que me hizo levantarme al momento. sali de mi habitación sabiendo que esa sería la última vez y bajé las escaleras camino a tu cuarto. Estaba cerrado. No importaba. Dicen que la ilusión puede con todo y estirando el brazo por la rejilla de tu ventana pude golpearte con un clavo y así, despertaste.

- Vamos?
- Vamos!!!

Desayunamos con la gente de casa, que al igual que nosotros, había amanecido temprano con cierta pena, nos dieron un fuerte abrazo que nos llenó de energía y nos fuimos.

Aquello fua el primero de este mes. Hoy es 19-J. Para la mayoría de los nuestros, hoy es el dia en que las manifestaciones, la coherencia y el sentido comun han vuelto a salir a la calle pidiendo y luchando por algo tan simple como un mundo mejor. A los que estamos lejos nos encantaría poder estar con ellos, poder ser parte de la historia de nuestro país, pero ahora no es posible. Como si de un acto egoista se tratasse, estamos escriviendo la nuestra propia, aunque con gran admiración para todos los que están allí.

El 19-J nos quedará como el día en que nos dimos un fuerta abrazo en la rodoviaria de Salvador de Bahía. Había acabado un grandisima etapa. Una etapa corta pero feliz. Una etapa que nos ha ensenhado muchas cosas y hemos pasado grandes momentos. De tí también mucho he aprendido.

Por desgracia, el viajar contigo, también me ha llevado a conocer la cara que menos me ha gustado de los brasileiros; su obsesión, para mí, en ciertos momento irracional, por las mujeres. Han sido varias las veces en que yo era, simplemente, el amigo de Natalia. Lejos de ofenderme o sentarme mal, en el fondo, lo he agradecido, pues el poder estar tranquilo, sin nadie atosingándome o insistiéndome, es algo que necesito. Simplemente me ha decepcionado darme cuenta de esa manera de ser. Dicen aqui, que en este país no hay hombre ni mujer que pase hambre (por desgracia, sexualmente hablando). Me parece genial, pero quizás esto les hace ser, a veces, como son. Y tampoco quiero generalizar, pues grandes pacos hemos dejado atrás, como Ailton, como Gean, como ... además de todos aquellos con los que hemos vivido en Fortaleza y admiramos y no metemos en este saco. Pero mi intención es contar lo que pienso, veo y siento.

A las 18:00 salía tu autobús camino a Recife, a la misma hora que yo tomaba el mío dirección Ouro Preto. Paradojas de la vida, la idea inicial cuando salimos de casa era ir hacia Salvador, y resulta, que este ha sido el último lugar que juntos hemos conocido y disfrutado.

Samuel Eto, en una entrevista con Michael Robinson, definía su etapa en el Barça, refiriéndo a sus companheros con esta frase:

"Dios tenia guardado esto para nosotros".

Dios (que lo dudo) o quien quiera que sea, pero simplemente, QUE GRANDE!!!!!

Lugares Especiais; Aldeia Hippie de Arembepe

Começamos com uma foto, para ir ficando em situação

Existem muitas formas de viver nossas vidas, mas infelizmente, não temos a oportunidade de conhecé-las nem experimentá-las em primera pessoa. Estes ultimos dias tivemos a oportunidade de viver na Aldeia Hippie de Arembepe. Criada nos anhos 50, é um remanso de paz e tranquilidade entre a praia e o mangui /lago/. Nela moram de 20 famílias, onde ainda podemos encontrar moradores que estão lá desde que foi criada. tudo é construido por eles a partir dos materiais que a natureza nos oferece. madeira, troncos e folhas dos coqueiros, entre muitas putras coisas. também encontramos pozos de água, pequenas balsas para pescar, e sobretudo muita amistade e buenris.

Chegar lá é uma deconexão total. em poucos minutos ja podes sentir-se como um mais. a hospitalidade dos moradores é increível. Além deles, também encontramos viajreos, artistas e artesanos. um dos viajeros com que conversamos fazia 15 anhos que estava viajando. Ele era brasileiro e sempre viajava pelo Brasil enteiro. Outra história interessante era a de Paulinho, um belga que viajou pela Europa durante meses. Depois pegou um barco para chegar até Cabo Verde e de lá com outros amigos pegaram uma barca e foram até o Brasil. 27 dias navegando, com pouca comida, sem muita experiencia e com uma embarcação bastante ruim. Quins collons

Natalia e eu ficamos em casa de Luis e sua filha, Lila raio de luz. Ela tem apenas tres anhos mas ja é muito comunicativa e inteligente. Morando com eles se pode ver como o ambiente no que ela se está criando é muito bom. conhece muitas pessoas, fala com todo o mundo e aprende a viver em mitade da natureza.

Foram dias de descanso, nos quais aprendimos a cozinhar pratos tipicos da gastronomia baiana, como a muqueca, que é um guiso de peixe com verduras e leite de coco, passeiamos pela aldeia, conversamos com os artesanos que lá vendem os seus trabalhos, dormimos a siesta e convivemos com os moradores de lá.

Foi realmente uma experiência única que acho muito recomendável para qualquer pessoa que viaje para o Brasil. O unico mau é o dificil que é ir embora!!!

a arte de luis

O Por do sol desde a janela

Linda Paissagem Noturna

En Barrules, reposant....

Na beira do Rio São Francisco

Antes de seguir caminho para Salvador, decidimos ir a conhecer o Rio São Francisco, um dos maiores do Brasil. Perguntado na Rodoviaria (esta vez decidimos ir de ônibus, pegar carona de resaca não presta não). Lá nos falaram que existia um lugar chamado Penedo que ficava na beurira do rio, vamos para lá!!!

Penedo me enamorou. É d'aqueles lugares apenas conhecidos mas con muito encanto e paz. Ja quando chegamos na posada, fui correndo para o banheiro e abri a janela. A paissagem era linda, linda, linda. É um pequeno povo baseado na atividade do rio, que da trabalho a muitas pessoas e alegria as outras. De ruas empedradas (sei não como dizer isto em portugues) e pequenas casa e igrejas, com uma galera tranquila e onde aproveitamos para comer um bom peixe baratinho e descansar.

Vistas desde a taça do banheiro

Um paco-pintor em mitade
da cidade

A galera louca de Penedo, onde o São João ja começou!

Era mais o menos as 5 horas, ideal para obvservar o por do sol. Os que me conhecem sabem que sou um amante deste momento. Pouco mas vou dizer, só algumas fotos.

O Paco-Pescador voltando para casa

Ficamos dos dias em Penedo, e é que além(además) da paz ainda tinhamos um lugar por decubrir; a maior reunião de pacos da região estava acontecendo lá. No rio, encontramos uma praia lotada (petada) de barracas onde os penedenses dedicavam-se tomar banho e beber muito, muito. Obviamente, como sempre, o Forró soava a todo volumen. Para aqueles que não conheçam o forro é a musica que soa em qualquer lugar, longe de ser poesia, é parecida ao reggeton aunque com un toque menos sexual. Pouco tempo demoró um cara a convidar a gente (em português para falar nos, se fala gente) a uma cerveizinha. Como não há uma sem duas, nem duas sem três, lá estivemos mais de três horas. O dia acabou fazendo fotos com todos os pacos e pacas!!


Um paco, dos pacos

Todos os pacos jutos!!!

Já de caminho a Salvador, duas caronas; una para Aracaju e outra para Arembepe, onde temos uma aldeia hippie que devemos conhecer...

As praias cheias de paz

Como nunca se sabe quando vamos ter Internet de novo, vamos aproveitar para dá-lhe vida ao blog. Saindo de Recife, onde só ficamos uma noite, fomos para Porto de Galinhas. Ouvimos falar que lá tem umas piscinas naturais no meio do mar e todas estas coisas. Felizmente, nos falaram que a 3 km de lá têm outra praia, Macaraípe, onde pode ficar a barraca (tenda) na praia sem pagar e sem quase ninguém.

Saindo de Recife...

Chegamos a um pequeno povo de praia, de ruas de areia, de barzinhos e onde, como em tudo lugar do nordeste brasileiro, o surf faz parte da vida da galera. A idéia era ficar lá por duas noites, mas a magia do lugar, a tranqüilidade e as substancias que os moradores de lá fumam fizeram que demorassem 4 noites lá. Pessoalmente, sempre gostei mais viajar de trankis, sentir-me um pouco do lugar onde estou, no sempre ter que estar perguntado todo, já saber onde é que se come bem e barato, em fim, tranqüilo.

Olha aí oh!!!

Lá conhecemos muitas pessoas, sobretudo jovens que moram ou trabalham lá. Das coisas mais interessantes da viagem é conversar com o povo brasileiro, cada um tem sua história, e quase sempre é fascinante. Estou pensando em fazer uma seção sobre pequenas histórias, mas vamos ver...

Keita?

Quando finalmente conseguimos sair de Maracaípe, de novo para a estrada (carretera). Este vez foi diferente porque não tínhamos nenhum posto de camiões perto (cerca), que sempre é uma aposta segura, assim que pegamos um papelão, escrevemos nosso destino e levantamos o dedo polegar.

Foram 4 horas, das 8 da manhã até mediodia, hasta que um cara parou. Eu fui para ele e simplesmente me falou:

- Bora? (que significa, nos vamos?)

Corri para Natalia com a alegria de que tinha dado certo. As vezes é fácil perder a ilusão quando em 4 horas ninguém para, ninguém te fala, nada, mas quando o momento chega, e sempre chega, é increível!

Outra das coisas boas de viajar de carona é estabelecer conversação com pessoagens variados e curiosos. Esta vez o assunto começou fazendo um cálculo do tempo que íamos demorar até o destino:

- Quanto tempo é até Maceió mais o menos?

- Só 3 horas, e se não fora por vocês uma e média.

(Con lo poço que me gusta a mi correr en coche, carretera de curvas a toda leche, PuesmuBieng!!!)

Novamente a paissagem era linda, como se fora a comarca no filme do senhor dos anéis. Mas cada viagem te apresenta novas coisas. De repente, se podem ver conjuntos de casas (se assim se pode falar. Eram feitas de barro, plástico, e pouco mais). Um dos maiores problemas do Brasil e de America Latina é a gestão da terra, os latifúndios. O Brasil, sobretudo o Nordeste, é ainda controlado por poucas famílias que têm o controle da terra, do poder, da política e de todo. Existem movimentos como o MST (Movimento Sem Terra) que lutam contra isto. Estes assentamentos são criados pelo governo para ajudar as famílias pobres a ter um emprego e uma casa. Lá trabalham a terra para receber um salário baixo, muito baixo. Quando têm sorte, mediante a ação do governo, os donos da terra são obrigados a dar pequenas partes às famílias, para que elas gerenciem todo e podam ter uma vida e condições de trabalho mais dignas. O MST e outros movimentos similares são fortes aqui no Brasil e é fácil encontrar informação pela Internet ao respeito, mas a realidade é que enquanto os latifundistas continuem sendo as mesmas pessoas que ganham as eleições dos estadosparece difícil resolver estes problemas.

Em pouco mais de 3 horas estávamos em Maceió, a capital do estado de Alagoas. Cidade parecida a Fortaleza mas menor. Lá ficamos só duas noites, a primeira tranqüilos, e a segunda aproveitamos para ir para um concerto de reggea, Katckafire, que, sinceramente, poderia ter sido melhor. Não sempre sai todo perfeito!!

Um abraço para todos!!

Fotos do post anterior

Uma das grandes coisas que toda cidade na America do Sul é que nas ruas do centro pode encontrar qualquer objeto que você precisa. Assim, hoje, em pouco mais de 5 minutos ja comprei um cacharrin para conectar o cartão da camara ao computador. Assim que vamos com as fotos!



Este foi o ponto de partida da viagem. O posto de fiscalização de camiões. Caminhando pela carreteira, no Km 17 da BR.







Nosso primeiro camião, um forte alemão dirigido por um cara calado, mas simpático e agradável. Cada dia fazia o trajeto Fortaleza-Mossorró-Fortaleza levando cemento em pó.








As estradas brasileiras são rectas infinitas sem fim. Uma paissagem linda para contemplar. Na direita, o grande motorista do Alemão.

Segunda carona; esta vez tocava transportar farinha. Ao principo não sabiamos que ela ia ser nossa parseira de durmir. O amigo Buturi estava viajando até Salvador e como vivimos na era da informática, tinha um aparelho no camião que não deixava dirigir ele mais tarde das 22:00, assim que tivemos que durmir num posto de gasolina.



De manhã, rumbo para Recife. O Nordeste do Brasil é a região mais agrícola. Na chegada dos portugueses, se desenvolviu pelo cultivo de cana de açucar, de onde também se faz o segundo melhor invento da historia da humanidade: a cachaça! Depois, quando os holandeses levaram a cana para o Caribe, foi o principo do empobrecimento desta região, que ainda hoje, é a mais pobre do Brasil.



Ao poco de chegar a Olinda, fuimos para praia. Lá, o cara (per dir paco en portugues) da dereita convdidou a uma, duas, três,.. cachaças e terminados o dia com tudos os pacos da cidade tomando qualquer coisa com alcol.



Bonito lugar para passar a tarde conversando e tomando. Entre copa e copa, aproveitavamos para sair e tomar o ar (aire) e rebaixar a bebedeira.




E por último, uma foto da nossa casa em Olinda. Rede (o primeiro melhor invento da histôria da humanidade) em frente do mar, beleza pura (de putissima madre!!)