domingo, 26 de junio de 2011

Pinchao en Brasil, parte 1 y espero que última

Rememorando grandes momentos, le pongo título a este post que para algunos ya es conocido. Fue en 2009, conociendo Colombia con Ginhas, Heavy e Irris. Creo que fue gracias a un autobus averiado a las 5 de la madrugada en plena carretera que nació Pinchaos en Colmbia. De esto me acordé unos días atrás...


Como si ya estuviera escrita, esta historia también empieza a las 5 de la madrugada que fue cuando el autobús nos dejaba en el famoso Rio de Janeiro. Aún estaba oscuro, y mientras me despedía de Armando, las cooperativas de taxi se peleaban para llevarme a precio gringo a donde yo quisiera. Pero aquí ni se gasta en taxis ni se necesitan, o eso creía. El plan era fácil; Maicon, un paco que había conocido en Ouro Preto y vivía en Rio, me recogía, íbamos a casa y a caminar, fantástico!

Por cierto, olvidé algunos detalles. El día anterior había salido decidido a pegar una carona desde Ouro Preto para Rio. No parecía complicado pues no están lejos (400 km en Brasil es como ir de Barcelona a Sancu). Llevaba 2 putas horas en la carretera con mi cartelito precioso hasta que llego un buen hombre y me dijo que estaba en el lugar erróneo. Entre la resaca y que la correcta estaba en Cancún, decidí tirar de autobús. Es mas duro esto de pegar carona solo. No hay con quien conversar ni compartir las largas horas de espera. Pero bueno, seguimos...

Pero como si obvio pareciera, las cosas nunca salen tan fácil. El celular del colega Maicon estaba desconectado, aunque por suerte, en un peqeuño papel medio roto, tenía anotada su dirección, así que sólo había que llegar hasta allí.

Me costó salir de la estación. Era de noche aún. Mejor esperar a que amaneciera y las calles se llenaran. La oscuridad siempre fue mas peligrosa. Además, Rio me impresionó. Entre la fama y la cantidad de gente malviviendo a las afueras de la estación, era mejor resguardarse.

Desaparecieron las bajas nuebes matinales y de lejos, bien arriba, apareció, imponente, el Cristo Redentor. Esa fue la señal que me hizo tirarme a buscar la casa del paco. Parecía fácil, pues sabiendo el nombre de la calle y el barrio, poco más se necesitaba.

Al llegar a São Conrado, un sitio tan plácido como irreal, pues está debajo de la mayor favela de la ciudad, Rochina, y es un barrio lleno de clubs de golf, edificios con muebles caros y gente rica, todo un homenaje a la hipocresia. Preguntando a absolutamente toda persona que me cruzaba, incluyendo taxistas, trabajadores, gasolineros, resulta que nadie conocía la calle Daves Bila de los cojones. Viendo el panorama, la decisión que consideré mas sabia fue sentarme, y fumarme un buen cigarro. Allí tuve la suerte de hacerme colega del quiosquero de la calle. Parecía un paco de vida relajada y sin sobresaltos, pero tenía su propia historia. Hacía diez años que había conseguido salir de la cocaína, adicción que le quitó todo, familia y dinero, y lo peor, la sensación de haber tirado por la borda unos años que podrían haber sido hermosos. Aquí es fácil escuchar historias bizarras, demasiado a veces. Eran las 9 y se estaba terminando la cuarta cerveza del día...

Recordé, en un flash que no se por que no me vino 4 o 5 horas antes (por que será?), que tenía otro número de teléfono. Era de otro amigo que había conocido en Ouro Preto. Al llamarlo me recomendó ir a buscar una posada al famoso barrio de Ipanema, así que autobús y pá lante.

Ipanema es tan famoso como, dependiendo desde que punto de vista, vergonzoso, y rápido uno se da cuenta que allí pocas posadas va a encontrar por pocos euros. 45 reales por noche la más barata (algo mas de 20 euros), porque todo lo demás oscila entre uno y dos salarios mínimos. Entre que está fuera de presupuesto y que no me estaba sintiendo muy a gusto allí, se me empezaban a terminar los recursos. Eran las 11 de la mañana, tenía hambre y todo era caro, me estaba meando, no sabía a donde ir, no tenía con quien compartir aquello y encima, me había quedado sin cerillas...

Al fin encontré una Lan house en la que el minuto de internet era mas caro que el metro cuadrado en Barna, pero había que hacer algo. De nuevo, fue la parte esa del cerebro que con frecuencia no trabaja, que apareció para decirme que había contactado con un paco de couchsurfing unos días antes y que habíamos dejado algo a medias. Conseguí llamarle y quedamos en encontrarnos por la tarde en su casa, genial!!!

Al pagar la Lan House encontré un mechero en la riñonera, salí y apareció el típico vendedor ambulante con bocatas a precio del nuestro. Me senté en la arena de la playa de Ipanema, con el clásico pedrusco que aparece en fotos y postales a la derecha, un montón de tías que llevan bikini porque aún no está permitido ir en pelotas y con un buen cigarro en la boca escribí estas líneas.

10 comentarios:

  1. Grande Barru! Tienes que mantenernos informados!

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  2. Te imaginat perfectament. Sobretoto el moment de dir "tatee, que tinc un altre número de teléfon"- mentre t'agafes el cabell. Cuidat molt i segueix informant :)

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  3. Com la saps Nuria, com la saps!!!

    Anxinho, suerte en esta andadura. Estamos en contacto

    abrazos

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  4. Barrulas, dos cosas te voy a decir.

    * Quita este color verde de fondo que me destroza las pupilas.

    * Me encanta tu viaje, como te lo estás tomando, de verdad. Yo al respecto del estar pinchado tengo una anécdota. Estaba con mi colega coreana, pinchadísimos haciendo autostop en una carretera sin asfaltar en mitad de la nada de una carretera argentina de muy al norte. Después de dos horas y que pasaran 3 coches que no nos pararon, me dice la coreana: "Estamos pinchaos, colega". Y la verdad es que alguien que viene de tan lejos te diga algo así en ese momento, hace que merezca la pena.

    Ya sabes que las cosas buenas, son buenas, pero las malas, después son historias que recordar. Felicidades barru, dale duro!!

    Un beso

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  5. que la palabra pinchao llegue a Corea es todo una historia a seguir!!!

    hablare con heavy por lo del color, que es el hacker del blog.

    Por cierto, tu no fuiste a Uruguay? he estado mirando tu blog y creo que no hay nada, yo voy hacia alli manhana (creo porque pensaba que seria hoy), si sabes de lugares cuentame

    abrazos!!

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  6. Miraré lo dels color del blog! Pero chavales... tiene huevos confiar el cambio de color a un daltonico que creia que este verde era lo más del buenris que había, jajaja.

    Un abrazo y suerte con Uruguay!

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  7. bien heavy bien, buen cambio!!

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  8. Si t'he de ser sincer... no se quins colors son... vaya webmaster més ridicul, jojojo.

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  9. Perdón, llego tarde. Uruguay fui solamente tres dias, y se me olvidó la camara asi que no hice post al respecto. Lugares a los que iría seguro (aunque no fui en su momento) Cabo Polonio y la Punta del Diablo, o almenos eso es lo que dice todo el mundo, aunque es más para ir en verano y ahora es todo lo contrario. Montevideo es como Bs As pero en pequeño y en descafeinado y Colonia merece una visitilla pero tampoco es la hostia. Mira los ferrys que van desde colonia a Tigre en argentina, que eran mas baratos y desde alli a bs as es al lado, 1 peso en el tren. Mira tambien coloniaexpress.com, que ponen ofertas buenas para cruzar a arg.

    un beso

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  10. What a memories!!! Pinchaos en Colombia, sóc aquí davant d'un munt de penya a la oficina i m'he despollat tot sol, la penya em mira raro pensant que fa aquest gilipolles que és feliç!!!

    Tios, m'encanta el vostre blog... jo si puc ja us faré una petita contribució, si m'accepteu des de Bolivia & Perú!!!

    Que marxo en 7 dies cap a Equador!!!

    PD:Aquell dia a les 5 del matí, pinchaos a Colombia recordo que no em va fer tanta gràcia!

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